El 28 de abril se celebra anualmente el Día Mundial de la Seguridad y Salud en el Trabajo. Este año, la Organización Internacional del Trabajo (OIT) conmemora este día con un tema de gran actualidad: el cambio climático, que afecta de forma general a la vida del planeta y, en consecuencia, a la vida laboral de las personas, ya que también tiene repercusiones en la seguridad y salud en el trabajo.
El cambio climático, entre otras consecuencias, provoca alteraciones en la temperatura y una elevada exposición a la radiación ultravioleta, que comporta una acentuación del estrés térmico, el aumento de enfermedades por patógenos nuevos o vectores provenientes de otras localizaciones geográficas, contaminación atmosférica, etc.
Trasladado al campo laboral, estas consecuencias amplían el riesgo de sufrir accidentes o enfermedades profesionales ocasionados por golpes de calor, deshidratación, quemaduras, falta de concentración, fatiga, alergias, riesgos biológicos y un largo etcétera, especialmente en personas que trabajan al aire libre en trabajos de agricultura, silvicultura, pesca, construcción, minería y canteras o almacenamientos exteriores, por citar algunos de ellos.
Por todas estas razones, se ha producido una reacción global que ha llevado a muchos países, como es el caso de España, a elaborar planes de actuación para hacer frente a estos riesgos por fenómenos atmosféricos adversos que cada año provocan más siniestros laborales mortales o de carácter grave. Por ejemplo, una de las medidas que se han adoptado ante las fuertes olas de calor producidas en los últimos veranos, ha sido la adaptación de las condiciones de trabajo, incluyendo la reducción o modificación de las horas de desarrollo de la jornada laboral ante determinadas situaciones de alerta por este tipo de fenómenos.
Por su lado, las empresas también tienen la obligación de adaptar sus evaluaciones de riesgos para contemplar este tipo de peligro, teniendo en cuenta las características de las tareas desarrolladas, el horario de las mismas y las particularidades personales de los trabajadores y trabajadoras (puedes consultar más información). No hay que olvidarse tampoco de las condiciones climatológicas de invierno, ya que existen condicionantes que potencian el riesgo de sufrir accidentes, como el frío extremo o las heladas.
En Unión de Mutuas, estamos concienciados con la problemática existente sobre los cambios en el clima que se están produciendo. Por este motivo, queremos compartir la campaña que ha preparado la OIT sobre las repercusiones del cambio climático en la seguridad y salud en el trabajo y hacer partícipes a empresas y personas trabajadoras de la gravedad de la situación, para que entre todos evitemos que este cambio climático tan perjudicial para el medioambiente y la vida en nuestro planeta siga en aumento.